La ciudad de Buenos Aires esta llena de secretos escondidos en el crecimiento urbano de sus edificios, lugares que uno cree que ya no existen en el tiempo, pero fue en un sitio así donde gracias a la invitación de Agencia Na, conocí a tres mendocinos cuyos destinos fueron cruzados por el vino. Jorge Cabrera, Gustavo Flores Bazán y Federico Lancia son creadores de la Argentina Wine Experience, una gala de vinos de alta gama.
Mendoza de pura cepa
– De pasado desértico transformado por el hombre, la vendimia identifica a Mendoza como provincia, gracias a los generosos frutos de sus vides y al agua que corre como arterias abiertas de fertilidad. Por allí pasan los amores y el carácter de los mendocinos que sienten el aspecto sustancial que tiene la cultura de cuyo.
(F. Lancia) Algunos dicen que los mendocinos no compramos vino porque siempre tenemos algún amigo que te lo lleva y algo de verdad tienen porque las bodegas venden muy poco en Mendoza, más allá que el 70% de la industria vitivinícola esta ahí, la principal plaza es Buenos Aires.
Yo empecé hace 20 años con el periodismo del vino, me enamoro esta idea de que es parte de nuestra cultura igual que con la comida es parte de nuestro ADN. En la época que yo comencé había mucha comunicación del vino pero era para la industria mucho dato estadístico duro digamos y yo decidí comunicarlo a los consumidores a decirle a la gente esto es un malbec, un cabernet etc.
(G.Flores Bazán) Los primeros pasos en el periodismo los di trabajando para el diario Los Andes, a mediados de la década del 90 se empezaba gestar en Mendoza y en toda la Argentina la vitivinicultura que hoy conocemos. Ahí surgieron algunas notas vinculadas al turismo de las bodegas, años después ya trabajando para otro medio y dirigiendo una radio empezamos más de lleno a generar contenidos del vino y ya no paramos más, el que entra en el vino es una pasión y un camino de ida . De ahí fue una largo camino de trabajar en distintos lados, de generar medios propios y marcas propias, además me gusto siempre la producción y organización de eventos entonces una cosa fue llevándonos a la otra y al poco tiempo empezó la idea de organizar degustaciones que después fueron ferias de vino.
En Buenos Aires hemos encontrado un lugar emocionante como el convento Santa Clara en el Hotel Intercontinental que nos abrió la puerta y estamos muy contentos porque es un lugar fundacional de la Argentina, un lugar donde transcurrieron las invasiones inglesas y que tiene un lugar que homenajea a los caídos, tantos criollos como patriotas.
– La elección del lugar fue fantástica digna de una locación cinematográfica con paredes que brindan un relato donde reposa serenamente la historia nacional. La noche transcurrió entre velas encendidas sobre altares sin que la música del DJ perturbara esa espiritualidad que flotaba en el aire, si hasta el Cristo que se encontraba en el patio hizo el milagro una vez más y dejó su sangre en cada botella.
(J.Cabrera) Mendoza es una provincia referencial para el mundo del vino pero después de tantos años vinculado a la industria te das cuenta que Argentina es mucho más, por eso hoy en Argentina Wine Experience podemos disfrutar vinos desde Chubut hasta Cafayate, somos muy respetuosos de cada uno de los terroir por eso intentamos darle a las bodegas la oportunidad de que puedan presentar sus vinos íconos más referenciales en un ambiente tranquilo y este caso puntual en el Convento de las Clarisas de 1795 que le da un marco cultural ya que nosotros pensamos que el vino argentino tiene un peso cultural mayor al resto de los vinos del nuevo mundo. Por eso elegimos el barrio de Montserrat cuando vimos el convento dijimos este es el lugar.
(G.Flores Bazán) Nosotros desde la organización buscamos que sea una experiencia donde la gente disfrute del vino que pase un buen momento y para eso hay que tener en cuenta que el marco sea el apropiado, que los vinos mantengan la temperatura del servicio, tener una buena copa, un sommelier, un ámbito agradable para estar distendido en familia con amigos o en pareja.
Nuestra función tiene que ver con la educación con la parte de transmitir los valores de la cultura del vino.
– En tiempos de tantas redes sociales donde las ideas se disfrazan de originales y más allá del acercamiento que brinda la tecnología, mi consulta es sobre que lenguaje utilizan en la comunicación.
(F.Lancia) A las bodegas siempre les dije que acá el protagonista de todo es el consumidor, es el rey, porque muchas veces las bodegas pecan de egocéntricas diciendo que hacen tal cosa y se olvidan un poquito del eje que es el público. Y a la gente le digo que se anime a probar, que sea infiel, que busque etiquetas, ahí esta la magia del vino
(J.Cabrera) Yo creo hay que armar una comunicación muy simple todo termina en que te gusta o no te gusta, no dar un mensaje complejo centrándose en los descriptores del vino porque es una situación que te remite a la memoria y por ahí hay situaciones que la gente las pudo haber tenido o no.
Sobre todo intentar por ahí dar algunos tips sobre las zonas, la historia que hay atrás de cada botella realmente tenes gente que se sacrifica muchísimo. No es una industria fácil hay mucha oferta de vinos y lo que nosotros tratamos es justamente difundir sus características y después que decida el consumidor cuando llegue al punto de venta, que estire el brazo y encuentre esa botella, Argentina tiene que trabajar mucho en eso tanto en el mercado interno como externo.
El mapa del vino
– El mundo visto desde el viñedo traza de manera perfecta un pasado reciente, un presente reconfortante y un futuro auspicioso.
(G.Flores Bazán) A fines de los 90 empezaron a llegar las inversiones extranjeras al Valle de Uco fue un momento donde las bodegas pudieron equiparse con nueva tecnología, hasta ese momento era todo muy tradicional, fue una nueva etapa para la Argentina vitivinícola también llegaron los winemakers como Michel Rolland, Paul Hobbs, los enólogos argentinos empezaron a viajar, fue básicamente abrirse al mundo y empezar a transitar una vitivinicultura de calidad que hasta el momento tenia otro perfil mas vinculado al consumo masivo al vino de mesa, pero no cambio la pasión y esa cultura que viene muy arraigada en los mendocinos y en los argentinos en general.
Hoy podemos ir conociendo más a fondo, los consumidores más sofisticados empiezan a escarbar cada vez más sobre el terroir, las calicatas, la segmentación, la sofisticación cosas que años atrás eran inexistentes.
(J.Cabrera) Existe una Patagonia enorme para descubrir y lo mismo pasa con el norte de Argentina, con Buenos Aires si bien es mucho más incipiente y hay una rotación de cultivo diferente a la paciencia que le tenes que tener al vino, vos tenés un corte en la Argentina donde hacia al oeste hay mucha más vitivinicultura que en La Pampa que podés tener dos o tres levantadas de cultivo y que son más rentables y se maneja diferente.
– La palabra Mercado guarda una nostalgia de otros tiempos, lugares que veían pasar la vida de los vecinos que concurren a realizar sus compras cotidianas. Hoy en día dicha palabra tomó un vuelo internacional que la colocó en el centro de mesas largas donde se definen futuros inciertos.
(F.Lancia) La crisis mundial del consumo del vino muestra una clara baja, hay muchas bodegas que venden bien en el mercado interno y están apostando a muchos productos para el argentino. Sin dudas hay una gran posibilidad si las condiciones macroeconómicas acompañan para que la Argentina crezca en el mercado externo, pero hay muchas bodegas pensando en los argentinos y eso me alienta.
El mercado se hizo Premium y se ha olvidado un poco de vinos históricos de la Argentina de bodegones esos que acompañaron a nuestros abuelos y a nuestros padres, vinos de todos los días en la mesa de los argentinos. Yo creo que la industria tiene que hacer un esfuerzo ahí pensando en las nuevas generaciones sobre que les gusta a los jóvenes si quieren menos alcohol, vinos más sencillos, sustentables quizás por ahí se recupere un poco el mercado en el segmento bajo, pero hoy yo me animo a decir que no hay vinos malos en Argentina es muy difícil encontrar vinos con defectos en nuestro país y eso esa una buena noticia.
(J.Cabrera) Para el mercado externo a Argentina le hace falta desarrollar acuerdos en muchos países, en realidad es muy importante para todas las economías regionales no solo para el vino.
Argentina salió un poquito más tarde pero tiene una ventaja que cuando salió intento posicionarse en un segmento con un precio que defiende el producto comparado con otros países del nuevo mundo, eso es muy importante para bajar después hay tiempo.
En el mercado interno como en cualquier país del mundo hay tendencias que van cambiando hay un concepto que apela mucho más a la bebida sana, la baja graduación alcohólica, a los vinos frescos y esa es la base de la pirámide de los consumidores que después pueden llegar a un vino más complejo que no lo tomaran a los 25 sino a los 45 años, el vino es un proceso donde lo vas descubriendo etapa por etapa y cada momento de tu vida está ligado a un estilo de vino.
La travesía del reconocimiento
– Los enólogos son ese tipo de gente que cuando descorchamos un vino aunque no los veamos están agazapados esperando ansiosos el gesto que defina nuestra sensación. Lejos de premios internacionales y de críticos expertos que ostentan un poder exagerado para mi gusto, hay un concurso que ofrece mucho más que un reconocimiento.
(J.Cabrera) El The Winemakers arrancó en casa hace 10 años con 16 enólogos, recuerdo que le dije a mi mujer vamos a hacer una juntada de amigos para tomar unos vinos y cada uno llevo 8 etiquetas para que probáramos, quedó un cementerio de botellas y mi mujer me dice esto no es una juntada de amigos y ahí empezó.
Siempre cata a ciegas después fue creciendo pero siempre con la misma consigna, no creo en la cata que no es a ciegas, para mi la que hacen los críticos de vinos es muy subjetiva, es una cuestión que ya después de mucho tiempo el crítico se termina hasta haciendo amigo y pierde esa pureza de objetividad. Hoy el enólogo argentino viaja mucho conoce muchos vinos de altísima gama por lo que tiene el paladar mucho más afilado, es un grupo de degustadores muy homogéneo porque todos elaboran vinos sufren a veces la circunstancia del clima que tiene la argentina o la situación económica que puede tener el país y las cosas buenas también.
Este año participaron 73 bodegas y 120 enólogos, utilizamos una aplicación creada específicamente para esto donde todos los chicos al terminar de catar puntúan y queda el ganador automáticamente, para nosotros es muy importante esta innovación tecnológica aplicada a este concurso.
Lo que genera esta reunión es una visión de los enólogos de Argentina de hacia dónde está yendo la enología ese año, una información para nosotros muy importante que obviamente se comparte a través de una campaña de prensa para orientar un poco a las vinotecas y al consumidor.
Yo creo que esas ganas de compartir, de integrarse, de ser solidarios, de poder preguntarle al otro che que te pareció, esa generosidad que tiene la enología Argentina tiene un costado humano muy lindo que no se podría lograr sin el espíritu de compañerismo que tienen los enólogos.
– La pasión nos impulsa hacia lugares desconocidos sobre vientos de libertad que hacen más liviano el viaje y nos dejan de frente al horizonte.
(J.Cabrera) Hay otra cosa como para cerrar que es muy linda, vas conociendo la historia que hay detrás de una botella en Jujuy, en Gualjaina, Gaiman, Buenos Aires, en un pueblito de Córdoba, Tucumán el sacrificio que hace esa gente y el espíritu que tiene hace que te retroalimentes, vos decís a esta gente no la puedo dejar sola la tengo que integrar porque realmente lo hacen desde el corazón.
(F.Lancia) Espero un futuro con un vino argentino totalmente instalado en el mundo, sin tantos vaivenes pendulares entre vinos tan maderizados y sin madera, verticales y filosos sino que encontremos ese norte con una identidad, un patrimonio con un claro horizonte, eso es lo que tratamos de mostrarles a todos que esta bebida es parte de nuestra cultura.
– De tanto andar algunas cosas he aprendido, se que hacia adelante al vino lo espera una película maravillosa y sé también que estos tres cuyanos, habitantes de una tierra elegida, seguirán como fieles mosqueteros de la bebida nacional.