La venta y mercadeo de whisky a veces incluye la frase cask strenght o “fuerza del barril”. Estas palabras se colocan en botellas seleccionadas para que se destaquen entre los consumidores, que piden bebidas en bares o compran en tiendas físicas o en línea.
Como las definiciones legales varían, poner las palabras “fuerza de barril” o cask strenght en una botella puede ser una designación superficial. En muchos casos, significa exclusividad o algún tipo de acceso directo a un club de degustación de whisky repleto de barriles.
Sin embargo, también puede referirse a una bebida espirituosa embotellada directamente del barril en el que se envejeció, sin agua añadida para ajustar la prueba, algo que también se denomina comúnmente “prueba de barril” o “fuerza del barril”.
Creo que la mayoría de los destiladores estarían de acuerdo en que un whisky de barril es aquel en el que, el volumen de alcohol del producto embotellado terminado es exactamente el mismo que el volumen del líquido de los barriles de los que se obtuvieron.
Factores clave que afectan la fuerza del whisky y el cask strength
El alcohol por volumen y el sabor dentro de la barrica; el tipo de barrica utilizada, como roble nuevo en comparación con una barrica más vieja, y el tipo de madera de la que está hecha la barrica, como el americano, roble europeo o japonés. Estos factores afectan la forma en que una madera en particular reacciona con el alcohol que contiene.
Pasar tiempo en contacto con la madera también aporta aromas, sabores y un ligero tono ámbar a un destilado. La madera carbonizada dentro del barril absorbe las notas ásperas que quedan de la destilación, al igual que lo hace un filtro Brita con el agua del grifo.
Y dado que la madera es permeable, el whisky puede absorber oxígeno, así como adaptarse a los cambios de temperatura y transformarse de un licor claro al familiar licor marrón que la mayoría de nosotros conocemos como whisky.
La mayoría de los whiskies se diluyen ligeramente y se venden al 40-45% vol. (80-90 grados). El whisky de barril normalmente se embotella al 50 % vol. (100 pruebas) o más.
Conor O’Discroll, maestro destilador de Heaven Hill Distillery, cree que la distinción puede ayudar a demostrar el calibre de una marca o la habilidad del destilador.
La prueba de barriles “Cask Strength” se definió en los EE. UU. en 1977
A través de una decisión de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) y decisiones adicionales de la Oficina de Impuestos y Comercio de Alcohol y Tabaco (TTB) desde entonces han tenido como objetivo ampliar las definiciones para incluir la término resistencia del barril.
Países como el Reino Unido también tienen sus propias regulaciones sobre ciertas frases relacionadas con la prueba de embotellado en productos como el whisky escocés, aunque dada la variedad de productores de bebidas espirituosas a nivel mundial y las frases que suenan similares que pueden aparecer en una etiqueta, los detalles específicos pueden ser difíciles de precisar para los consumidores habituales.
Es el apogeo de la moda de beber actual, dicen sobre el término fuerza de barril. En muchos sentidos, es parte de la individualización de los licores destilados, diciéndole efectivamente al destilador No confiamos en que lo pruebes a mi gusto.
Por otro lado, tiene un gran valor de compra: si tiende a usar agua cuando la bebe, básicamente está comprando más de los 750 ml que pagó. Pero si lo bebe solo todo el tiempo, es posible que deba buscar ayuda profesional.
Resumiendo para comprender bien el tema
Significado de Cask Strength
Más que referirse a cualquier proceso por el que haya pasado el whisky, la graduación en barrica se refiere a lo que no se ha hecho. La mayoría de los whiskies se reducen a un porcentaje estándar de alcohol por volumen, o grado, añadiendo agua a la bebida antes de embotellarla para que cada lote sea consistente.
Sin embargo, un whisky con fuerza de barril, cask strength, se embotella con la fuerza a la que se extrae del barril: no se le añade ni se le quita nada.
¿Afecta el Cask Strength al sabor?
Estos whiskies tienen un gran sabor. Cuando el espíritu claro entra por primera vez en la barrica, su sabor es bastante singular, cargado del carácter único. Con el tiempo, el whisky desarrolla una relación simbiótica con la barrica de roble: el líquido se filtra en la veta de la madera a medida que los sabores contenidos en el roble se difunden en el espíritu.
Es aquí donde se crean los sabores intensos y robustos que caracterizan a un whisky de barrica.
¿Cómo se bebe el whisky de Cask Strength?
Si tiene un whisky de cask strenght en su colección, la mejor manera de disfrutarlo es con agua. Nunca debe tener miedo de diluir su whisky para adaptarlo a sus gustos personales.
Añada agua a temperatura ambiente o un cubito de hielo, lo que prefiera, pero tenga cuidado de no diluir demasiado. Añada el agua poco a poco, probando el whisky después de cada adición.
Notará cambios sutiles en el sabor a medida que se liberan los diferentes tonos y sabores, sacando a relucir las complejidades de la bebida espirituosa.
