El mercado ofrece al consumidor, particularmente en lo que se refiere a vinos tintos, dos clases de productos: los jóvenes, frescos y frutado, para ser bebidos en el año y los grandes vinos, elaborados con el propósito de lograr la mayor conservación en el tiempo.
Los vinos elaborados para un consumo más o menos rápido, poseen una graduación alcohólica media, son livianos de cuerpo, ricos en aromas, y generalmente varietales.
Poseen buena acidez y cuanto más, pueden beberse en el año o al siguiente de la vinificación. En algunas ocasiones, pueden ser sometidos a una ligera conservación en barrica de roble, pero no son adecuados para una estadía prolongada en botella.
Se pueden guardar aquellos vinos tintos elaborados con este objetivo. Para elaborar tintos de guarda, se requieren no solamente vides selectas, cultivadas en el mejor medio, sino también una depurada metodología de vinificación.
Todo vino digno de su calidad, merece ser guardado, desde algunos meses hasta varios años. Dicho de otra manera, mientras mejor sea su vino, más se beneficiará con la guarda.
Ahora, tenga la seguridad, de que si todo lo anterior se cumple, al descorchar estas botellas de vinos de guarda, usted nunca se ver desilusionado.
¿Qué cambios sufrirá un vino tino sometido al envejecimiento en botella?
En cuanto al color
Durante su a añejamiento en botella, los vinos timos de jerarquía suelen realizar depósitos de materia colorante, asimismo, con el tiempo su color disminuye de intensidad y su tonalidad vira cada vez más hacia el rojo ladrillo o tela de cebolla.
Estas modificaciones del color son naturales, y de ninguna manera implican algo negativo en su vino de guarda.
En cuanto al aroma
En cambio, los aromas de su vino tinto de excelente calidad se desarrollarán al máximo durante la guarda. Alcanzarán un buqué complejo, equilibrado y armónico.
No olvide que esto se cumplirá siempre y cuando las condiciones de conservación sean las correctas y el estado de la botella y el corcho sean óptimas.
En cuanto al gusto
Con el paso del tiempo en botella, los vinos tintos tienden a suavizarse. En cuanto al desarrollo de la pastosidad y el sabor abocado, es debido, en parte, a la combinación de antocianos y taninos y su creciente polimerización; y por otra, también está ligado a la aparición de aquellas mismas sustancias que provocan el desarrollo del buqué.
Por todo esto, no olvide que tanto color, como buqué y gusto formarán parte de ese todo armónico que lo llenará de placer al descorchar estas botellas.
¿Cómo se pueden guardar los vinos en casa?
Según el tipo de elaboración y calidad del vino, veremos qué vinos se pueden guardar, o bien si será óptimo guardarlo o no.
Hoy, muchos vinos tintos se elaboran para ser consumidos jóvenes y frescos, pues éstos no son aconsejables para guardar mucho tiempo. Si lo son los llamados vinos de guarda.
La mejor manera de guardar un vino de calidad en casa, es en botellas. Muchas veces, llevados por el entusiasmo o por una propaganda errónea, se desea conservar el vino en un recipiente de madera o barrica.
Lamentablemente, este tipo de conservación, es bastante difícil de llevar a la práctica, ya que la barrica, aunque sea de muy buena calidad, debe ser mantenida y controlada muy celosamente. Se debe evitar la penetración de aire y la proliferación de bacterias, hecho bastante difícil de controlar en casa.
Generalmente, cuando se percibe un aroma o gusto raro en el vino de guarda, ya lo hemos perdido totalmente en cuanto a la calidad se refiere. Quizás podremos utilizarlo como un excelente vinagre de cocina.
Antes de guardar el vino, no olvide examinar el corcho, que esté en buenas condiciones y no presente manchas de humedad u hongos.
Las botellas se colocan en posición horizontal, quedando todo el corcho en contacto con el vino.
Imagine que las condiciones ideales se dan en una cava natural, por lo que todas las condiciones artificiales que se busquen deben acercarse lo más posible a las condiciones naturales que hay en un sótano de bodega:
- Temperatura fresca y constante
- Oscuridad
- Tranquilidad
- Cierto grado de humedad
Nuestra bodeguita casera
Con algo de imaginación es posible reproducir estas condiciones en un buen armario o debajo de la escalera.
Una técnica económica, es guardar el vino, en su propia caja de 6 u 9 botellas tradicionales, de cartón, y ubicarlo dentro de un armario, preferiblemente con ropa.
La ropa ayudara de aislar el vino de vibraciones y funcionara como un panel acústico. Tambien nos proporcionara un control de humedad, equilibrada.
Temperatura
El primer requisito es mantener a los vinos a una temperatura más o menos constante de alrededor de 15°C (puede existir una suave oscilación dentro de los 7°C a los 18°C).
El vino no se verá afectado si los cambios de temperatura se producen en forma suave y paulatina.
Luz
Nuestra peque a bodeguita debe tener poca luz. La oscuridad es importante, por que la luz estropea y envejece los vinos antes de tiempo.
Ni qué hablar si la botella es transparente y los rayos ultravioletas atraviesan el vidrio. Por eso los buenos vinos jamás deben estar expuestos a la luz fuerte.
Humedad
La humedad moderada de nuestra bodeguita permitirá que el corcho no se reseque, ni agriete, ya que si esto ocurre el vino comenzará a escapar hacia fuera de la botella y penetrará aire que ser muy dañino para nuestro vino.
Si la humedad es excesiva, comienzan a despegarse las etiquetas y usted no sabrá de que producto se trata. Para evitar esto, se suele rociar a la etiquetas con laca antes de guardarlas.
Vibraciones
Las vibraciones es otro factores de los que resguardar a nuestro vino.
Es importante evitar cualquier tipo de vibración fuerte y continua que pueda afectar al vino, ya que éstas son muy perjudiciales. Pueden llegar a producir lo que se conoce como “fatiga del vino”, especialmente aquellas vibraciones que se producen de una forma regular y continuada.
Sustancias contaminantes
La bodega tampoco deber estar expuesta a grandes trepidaciones. Recuerde no guardar junto a los vinos, otras sustancias contaminantes o con olores fuertes como nafta, barnices, pinturas o kerosene.
Para tener este pequeño refugio para sus vinos, no hace falta ni una construcción especial, ni grandes inversiones. Cuando no se cuenta con mayores recursos, basta acondicionar cualquier lugar de la casa que reúna aproximadamente las condiciones mencionadas
¿Cuánto tiempo puedo guardar el vino?
En realidad, este factor depende de la calidad del producto.
He tenido oportunidad de degustar vinos elaborados hace más de 35 años y ha sido el vino tinto más exquisito, complejo y equilibrado con el que me he encontrado.
El envejecimiento en esos vinos, es el pasaporte al éxtasis. No ocurre lo mismo, con mucho otros, denominados de guarda.
Entre nosotros, se suele apuntar que un buen vino tinto ha alcanzado su apogeo cuando su color atraviesa el espectro del rojo y adquiere débiles matices marrones y anaranjados.
Tiempo de guarda de vinos blancos
Los vinos blancos, sin embargo, cambian en otra dirección. Pasan del amarillo muy pálido, hasta el ámbar, pasando por el oro y el pajizo.
Los vinos blancos secos de calidad (elaborados con maceración y fermentación maloláctica), podrán permanecer en su bodeguita durante más tiempo, uno a tres años, luego bébaselos.
Sólo existen algunas excepciones de vinos blancos, que se aconsejan beber con más de 10 años de guarda, pero para nosotros, esto no es lo frecuente.
¿Una vez abierto el vino, como puedo conservarlo?
Si sabe que no va a terminar esa botella, manténgala cerrada. Puede ser fácil dejar el corcho fuera hasta que esté listo para guardar la botella, volver a tapar la botella inmediatamente después de cada copa es la primera defensa para mantener guardar el vino, una vez abierto.
Limita la cantidad de oxígeno que entra en contacto con el vino y ayuda a mantener su sabor fresco durante más tiempo
Asegúrate de que el mismo extremo del corcho vuelve a entrar en la botella (el otro extremo ha estado expuesto al moho y los olores). Si el corcho no entra con facilidad, utiliza la cuchilla de un sacacorchos para afeitar una muesca cerca de la parte inferior en cualquier lado, o usa un tapón de goma reutilizable.
¿Se refrigera un vino una vez abierto?
Todos los vinos, incluidos los tintos, duran más si se refrigeran una vez abiertos.
Intente mantener su botella de vino abierta alejada de la luz y guárdela por debajo de la temperatura ambiente. La heladera suele ser el mejor lugar y puede contribuir en gran medida a mantener el vino fresco. Esto ralentiza el proceso de oxidación del vino, ya que las moléculas se mueven muy lentamente.