Bajo iniciativa del Distrito del Vino junto a la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires, se realizó una Master Class a cargo de Walter Bressia sobre las nuevas tendencias y análisis sobre el mundo del vino. El hombre de las 43 cosechas sobre sus hombros habló frente a más de 200 personas con los nervios propios que indican la pasión por una profesión. Durante una hora desparramó conocimientos y vivencias que hicieron del tiempo de los presentes la mejor inversión.
Impacto de la crisis económica en el mercado vitivinícola
Una vez finalizada la charla y luego de cinco meses, volvimos a hablar de cómo afecta la crisis en el mercado externo e interno.
Está pegando mucho, en el mercado interno venimos de una cosecha de precios muy altos, hubo que elevar los precios de los vinos, eso hizo que se bajara mucho el consumo, se notó y también complica este tipo de cambio
Walter Bressia: Enólogo, propietario de Bressia Wines y presidente de Bodegas de Argentina
“El mercado interno se rige mucho, sobre todo los proveedores de insumos, con el dólar blue es así y para las exportaciones nosotros tenemos el dólar oficial; entonces estamos complicados por los dos lados. Tenemos esta inflación que viene creciendo estrepitosamente y al ir actualizando los precios entre una botella de vino y un paquete de arroz no hay duda de lo que voy a comprar, eso nos está haciendo caer el consumo en el mercado interno y en las exportaciones, todas estas dificultades que tenemos con un tipo de cambio que está retrasado.”
Una ecuación cuyo resultado es la pérdida de territorios conquistados. “Lamentablemente estamos perdiendo mercado. Afuera tienes que hacer promociones; el importador tuyo para vender el vino tiene que hacer promociones como acá, en supermercados, vinotecas, revistas, sobre todo en un determinado nivel de precios. Los dos problemas mayores que tenemos son el tipo de cambio retrasado para exportar que no nos da con los costos que son más altos y también la imposibilidad de girar divisas al exterior para pagar esos servicios; al no poder sacar plata, el importador pierde el entusiasmo del vino argentino porque si hace promociones no se las puedes pagar y si no las hace no vende, entonces te reemplaza por otros vinos.”
El futuro y la adaptación de la industria vitivinícola Argentina
Me pregunto si las bodegas producen un estilo de vino particular para llegar a un nicho determinado. La respuesta del enólogo es clara: “No, antes hace varios años muchas bodegas hacían un vino para afuera y otro para acá, ahora todas las bodegas hacen el mismo vino porque el nivel de calidad de los vinos argentinos subió mucho; estamos a nivel internacional muy bien.”
Ante la nuevas tendencias de vinos orgánicos, sustentables con poca intervención del hombre, qué lugar ocuparán aquellos concentrados con buena madera, viendo a donde va la pregunta anticipa la jugada y responde: “Van a seguir, es un público. La juventud no es eterna, en un momento van cambiando y van llegando a esos vinos, va a haber un mercado para todos. ¿Será entonces que los vinos de crianza al igual que el Tango estarán esperando por esos jóvenes?”
Consultado en su rol de Presidente de Bodegas de Argentinas sobre cómo se enfrenta esta crisis, nos dice Walter: “Es difícil porque nosotros como cámara no podemos interferir en los temas comerciales, somos una organización gremial empresarial no estamos en proponer precios en absoluto, el precio se regula según la oferta y demanda que hay en el mercado. En cuanto se empiece a estabilizar en algún momento la situación vamos a ir recuperando el terreno en el mercado interno, afuera va a ser mucho más difícil.”
Una vez más Walter Bressia nos dejó conceptos claros bajo la mirada de aquellos que salen a jugar cada partido confiando en su talento y su equipo, todo enmarcado en su calidez que al despedir con un abrazo deja la buena energía de esos tipos que espero volver a cruzar.